jueves, 24 de octubre de 2013

Reflexión del 1er Aniversario Luctuoso de Ismael y Manuelita



Ser cristiano/a significa mantener la fe con aquellos /as que han escuchado y vivido el llamado de   y que en la lucha se han negado a ser víctimas y a doblegarse  frente a las amenazas de violencia, sufrimiento y muerte.
Dios por la justicia, el amor radical y la liberación que han desafiado los sistemas injustos

Hermanas / Hermanos

Aquí estoy en la tierra de mi abuela María,  del abuelo Juan, la que me vio nacer, la misma que vio crecer a Ismael , a Manuelita y a sus hijos; confieso que al igual que ustedes,  un nudo de  indignación que no acaba de salir de mi  ser; por  la impotencia de ver la imperante impunidad me agobia.

Sin embargo, esta tierra bendita que nos alimenta y da la vida, fue fecundada con la sangre mártir de Ismael y Manuelita, por su lucha solidaria con nuestro pueblo  y la mejor forma de honrar su memoria, es hacer  que la semilla de esperanza que sembraron en quienes los conocimos y les amamos,  germine y de fruto.



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