RETÉN CIUDADANO

De interés público ... (10-05-2013).

RETÉN CIUDADANO

Por: Julio Morales Quiñones

Cuando una Ley es injusta, lo más justo es violar esa Ley. (Mahatma Gandhi).

La tarde del jueves que encerré la Nissan en la 24, olvidé datos para mi tema; me enteré de ello al tratar de iniciarlo. Volví por ellos en mi turbo. Eran las 22 hs cuando por Terrazas y mi derecha llegué a la 34; advertí entonces, por la derecha, enfrente, sobre el pavimento, la luz de los faros de un auto estacionado -mafiosos, pensé- por ello, cambié de carril, cruzando la Terrazas para subir la 34, al tiempo que otra persona cruzaba caminando frente a mí, de izquierda a derecha. Reconocí al “menudero” -quien por consigna, cuida mi paso por e sector- y pasé bastante retirado de él. Es Posible que él y sus asesores, que graban y estudian mis rutinas, esperaban, subiera por mi derecha y nos toparamos del otro lado, pero el cálculo les falló una vez más; así que los expertos en vialidad, yunques y deteriorados sobrevivientes del alicaído partido, a estas horas deben andar con chorrillo por la frustración de estudiar con sumo cuidado mis recorridos e implementar con premeditación sus marranadas, para nada.

Siguiendo con marranadas; a la reunión dominical del Retén Ciudadano en el Parque Urueta, llegó el llamado de auxilio de un socio, quien -junto con su Esposa- fue retenido y era remitido en ese momento con todo y vehículo por elementos de Vialidad, que no reconocen el “Certificado de Depósito en Garantía Fiscal”, por concepto de pago por derecho de circulación vehicular para el presente ciclo, que expidió la Secretaría de Hacienda Estatal y aprobó la Recaudación de Rentas; de lo que oportunamente, se notificó por escrito, a las dependencias cuyos elementos participan en las células mixtas, (fiscalía, Dspm, tránsito y vialidad, Pfp). La justificación de la vigilancia fue falta de “aseguranza” del vehículo, que solo amerita infracción, no ser remitido al corralón. Como el personal presente en la dependencia dijo no tener facultades para liberar de inmediato el vehículo del corralón con las 2 personas a bordo y reparar en algo la arbitrariedad, bloqueamos la entrada con nuestros autos y los intransigentes pidieron grúas para, no solo retirar sino empezar a enganchar los vehículos atravesados.

Varios se interpusieron entre grúa y el auto a enganchar; el acto cesó y 6 comandantes aparecieron con sus respectivas patrullas; con ellos se dialogó. Por pretextos de control cibernético no entregaron de inmediato la unidad secuestrada y la tolerancia aceptó que hasta el día siguiente -lunes- previa acreditación requerida, el propietario recibiría su mueble. Pero como el lunes, la cerrazón oficial siguió, ante la Prensa, en el interior del inmueble atiborrado, se arengó a los contribuyentes a unirse contra un gobierno que roba, inventando impuestos e infracciones. No pagaremos lo que arbitrariamente decidieron. Solo lo justo y proporcional al incremento del mínisalario: $324.80 por derecho de circulación vehicular.

Ignoramos lo que Vialidad informó en ese momento a los medios. Curiosamente al siguiente día apareció la nota de que se suspendían temporalmente los retenes “por la baja notable en accidentes y conductores ebrios”. También, desde el miércoles por la mañana, noté en torno al Parque Lerdo, falta de vigilancia. Ahí mismo frente a Junta de Aguas escuché un chirrido de neumáticos, cuando una Mujer que conducía un auto plateado, estuvo a punto de atropellar a otra en el invisible paso peatonal. Ambos casos se los comenté al único agente que de pronto apareció a un lado de Al-Súper; él respondió que reportaría la invisibilidad del paso peatonal, pero desconocía porqué la falta de vigilantes.

La exigencia del Retén Ciudadano es y será, no que desaparezcan los Retenes de Vigilancia, sino que con tal pretexto, no se cometan arbitrariedades contra Ciudadanos pacíficos y sus familias. Faltaría que si aumentan los atropellamientos en la vialidad por pasos peatonales invisibles, se culpe al Retén Ciudadano por señalar la inconstitucionales de los otros Retenes.